En medio de la euforia por la clasificación a la final de la Leagues Cup con Inter Miami tras su victoria 3-1 sobre Orlando City, Lionel Messi sorprendió al mundo del fútbol con un anuncio inesperado. El capitán de la selección argentina confirmó que el próximo jueves 4 de septiembre, en el partido contra Venezuela en el Estadio Monumental, jugará por última vez en un encuentro oficial de eliminatorias sudamericanas.

“Va a ser un partido muy especial para mí porque es el último de Eliminatorias. No sé si después habrá amistosos o más partidos, pero este lo voy a vivir de una manera diferente. Estará toda mi familia acompañándome”, expresó Messi, en un tono que dejó entrever un importante acto de despedida. La noticia conmovió a los hinchas, que ya empiezan a prepararse para rendirle un sentido homenaje en esa noche especial.

Con 38 años y con la cabeza puesta en su historia con la selección, Messi ha ido gestionando su participación en la albiceleste en estos últimos meses. En 2025, solo jugó dos partidos durante la fecha FIFA en junio, aunque todavía podría disputar hasta seis partidos más antes de fin de año, en amistosos que incluye Estados Unidos, Angola e India. Sin embargo, la confirmación de su salida de las Eliminatorias marca un giro definitivo en su vínculo con la selección.

Mientras tanto, Messi continúa cosechando éxitos en su club. Inter Miami sumó una nueva final continental y aspira a conquistar el tercer título en la historia del club el próximo domingo, tras su doblete en la última victoria contra Orlando City. Su influencia en el fútbol mundial y en la historia argentina sigue siendo indiscutible, y su despedida oficial será un momento emotivo que quedará grabado en la memoria de todos los amantes del deporte.

Al llegar a su última etapa con la camiseta albiceleste, Messi genera sentimientos encontrados: la alegría de verlo una vez más en un partido oficial en el Monumental y la tristeza de pensar que se van acercando los últimos capítulos de una carrera que marcó una época. La noche del 4 de septiembre será, sin duda, una de las más recordadas en la historia del fútbol argentino.