El ministro Luis Caputo aseguró que tras las elecciones de medio término del lunes no habrá modificaciones en el plan económico y confirmó que las bandas cambiarias se mantendrán en los límites actuales; además afirmó estar “más que cómodo” con el dólar en $1.500 y rechazó las versiones sobre un cambio de esquema.

Caputo defendió la política cambiaria vigente y sostuvo que la moneda refleja el orden macroeconómico: comparó la situación actual con la heredada del gobierno anterior y dijo que, a diferencia de ese período, hoy el país presenta superávit fiscal y un déficit de cuenta corriente de un punto, condiciones que permiten sostener la banda cambiaria.

Sobre la cotización, el ministro sostuvo que el dólar “está holgadamente arriba” y que el mercado puede elegir el precio siempre que permanezca dentro de la banda; aseguró además que no espera que la divisa supere el techo vigente —ubicado en $1.492— y se pronunció en contra de una nueva devaluación por su impacto en salarios y consumo.

Caputo cuestionó a economistas que pronostican un salto cambiario post comicios y criticó a la prensa por instalar temor entre la población: dijo que esas visiones reproducen “el modelo viejo” de economía cerrada y salarios muy bajos en dólares, y apeló a reducir la volatilidad política como condición para recuperar credibilidad internacional.

Por último, el ministro pidió que la ciudadanía tenga tranquilidad respecto a la continuidad de la política económica y reiteró su rechazo a ajustes bruscos en el tipo de cambio, afirmando que la administración prioriza estabilidad monetaria dentro del esquema de bandas vigente.