Los Gobernadores le enviaron un mensaje a Milei
Tras el veto a los ATN

En un acto en Río Cuarto, los mandatarios provinciales que integran Provincias Unidas criticaron duramente al Gobierno nacional, tras la derrota electoral en Buenos Aires y en medio de una fuerte tensión con la Casa Rosada. El encuentro, encabezado por Gustavo Valdés, se convirtió en una muestra de rechazo por los vetos a leyes de emergencia y fondos, y en una denuncia de que el actual esquema de gestión no responde a las necesidades del interior del país.
Valdés, protagonista del acto, expresó: “Estoy cansado de irme a Buenos Aires, al Gobierno, y que me atiendan funcionarios de tercera línea”. Además, afirmó que las provincias están enfrentando una crisis de recursos y que, pese a tener equilibrio fiscal, la nación hace oídos sordos a las demandas del interior. Los dirigentes coincidieron en que deben defender sus principios y en que la ley de distribución de fondos, como los Aportes del Tesoro, debe respetarse y elevarse a rango obligatorio.
El reclamo principal apunta a la ley sancionada y vetada, que establece el reparto de los fondos del Tesoro entre las provincias. “En nuestras provincias, tenemos equilibrio fiscal, pero eso no significa que no tengamos problemas con la falta de fondos para hospitales, educación y producción”, afirmó Carlos Sadir, de Jujuy, quien adelantó que trabajarán para “hacer caer el veto” y fortalecer la ley. La reunión también sirvió para coordinar futuras visitas y acciones en defensa del federalismo.
Otro tema central fue el veto a la ley de emergencia pediátrica y financiamiento universitario. Los gobernadores consideran que esas leyes, sancionadas por el Congreso, son esenciales para millones de argentinos en situación vulnerable. Además, criticaron que el Gobierno retenga fondos de forma unilateral, sin establecer pautas claras, en medio de una disputa por el control del gasto y la distribución de recursos. “Es una concepción poco sensible para con sectores vulnerables”, resaltó Sadir.
El acto generó expectativa, en un contexto donde la tensión entre la Casa Rosada y las provincias aumenta, alimentada por las decisiones del Ejecutivo y las dudas sobre la capacidad de diálogo. La designación de Lisandro Catalán como interlocutor y la falta de una convocatoria formal refuerzan la idea de una relación marcada por la desconfianza, y la necesidad de impulsar una agenda que garantice el federalismo y el respeto por las leyes, en medio de un escenario electoral que anticipa cambios profundos en la gestión de recursos públicos.
viernes, 12 de septiembre de 2025
